Andar sin permiso

Una de las estrategias que hemos aprendido de las revoluciones sociales más recientes es la paciencia, encapsulada felizmente dentro del lema «vamos despacio porque vamos lejos». Las mujeres y hombres que estos días caminan desde León a Madrid nos recuerdan, una vez más, la potencia del paso que no se detiene, del que se da con ánimo constante y con las fuerzas que se tengan, sin necesidad de hacer alardes olímpicos…

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