Esta noche, Octave Mirbeau en ¿Quieres hacer el favor…?

«Gracias a Octave Mirbeau, la verdad se revela a nosotros, pero provocando una gran indignación : efectivamente, en las sociedades, aquella verdad no es buena para decir, puesto que es un factor de emancipación individual y de subversión social. Le hicieron pagar muy caro, a Mirbeau, después de su muerte, ocultando su mensaje, pretendiendo ver en él sólo a un energúmeno, un paroxista, uno que se retracta, un frenético o un obsceno, desnaturalizando su obra bajo etiquetas tan absurdas como mutilantes, particularmente el vergonzoso calificativo de «naturalista”. De la misma manera, durante veinticuatro siglos, no quisieron comprender que, detrás de las provocaciones más groseras de los cínicos, había una crítica radical, pedagógica, a las mentiras sobre las cuales reposa la cultura». (Pierre Michel, Octave Mirbeau el cínico).

Sé que usar hora para hablar de Octave Mirbeau será como intentar meter un armario dentro de un calcetín. A pesar de ello, no queda otra, ya que ese es el tiempo que tenemos: una hora de radio. Lo que es poco para nosotros es en realidad mucho para un oyente: una hora de su tiempo. Demasiado para oír hablar a unos fans de un autor que, quizá, no conoce.

No obstante, predicar aquí sobre Octave Mirbeau es hacerlo en un vergel, pues llevo todo el verano escribiendo sobre él y los lectores de este blog estarán familiarizados con este escritor francés que, aunque muriera en 1917, sigue vivo cien años después porque sus obras están ahí, aquí, significan algo hoy. No es una voz muerta.

Es curiosa la portada de esta edición de El jardín de los suplicios que tenemos a la izquierda. Luis Buñuel realizó una infiel adaptación de Diario de una camarera (le cambió el final) y para esta edición tomaron una imagen de Catherine Deneuve en Belle de Jour, de Buñuel. No tiene que ver nada con el libro porque la tortura no la recibe la hermosa protagonista del libro, Clara, como nos podría llevar a pensar la imagen escogida. Pero sí hay un trasfondo común: el sadismo.

Hablando de Clara, ayer encontré una sesión de fotos que homenajea a este personaje:

Esta noche vendrán a la radio varios invitados para invocar a Mirbeau. En persona estarán dos editores: Enrique Redel de Impedimenta y Eduardo Moreno o Iria Rebolo de El Olivo Azul. Llamaremos por teléfono a otras dos personas: Lluís Mª Todó, traductor de El jardín de los suplicios y Memorias de George el amargado y Lola Bermúdez, miembro del equipo de traducción de 628-E8 y ensayista sobre Mirbeau.