Los recortes matan

Gracias a la mediación de varias personas que confiaron en mí y en la manera de hacer periodismo de eldiario.es así como a la importancia que le damos a la defensa de lo público, entré en contacto con Yolanda P., una mujer cuya madre había fallecido en el Hospital Severo Ochoa de Leganés (Madrid) en enero, tras dos estancias en urgencias.

Lo que hace su historia importante de ser contada es que durante la primera estancia en urgencias, de una noche, su madre la pasó en una camilla en el pasillo anterior al pasillo de urgencias, pasando frío, frente a las puertas de los baños. Su madre, A. G., ingresó por una arritmia, pues había sido operada de corazón, por una válvula que iba mal, en el Hospital Clínico. Su cardiólogo le había dicho «vida normal». Pero vida normal, normal no es, es pasarse una noche sin mantas con las que abrigarse en unas urgencias atestadas, sobresaturadas. Era el día siguiente a la Navidad.

Yolanda nos ha proporcionado este vídeo que grabó esa noche:

A. fue dada de alta al día siguiente pero el 31 se encontró mal. Estaba desarrollando síntomas de neumonía y, al ingresar, le detectaron también infección de orina. También sufría arritmias. Pasó cuatro días y tres noches en un box de urgencias, cuando el protocolo del hospital recomienda no pasar más de un día allí. Cuando fue subida a planta, a las pocas horas, falleció. Raúl Rejón y yo contamos la historia completa en este artículo:

Una paciente muere en un hospital de Madrid tras cuatro días ‘aparcada’ en Urgencias

La historia tuvo de inmediato una importante repercusión, que pudo verse tanto en las lecturas del artículo, como en las miles de veces que fue compartido en redes sociales. También, en el interés de otros medios. Proporcionamos contacto con Yolanda a los compañeros de Las mañanas de Cuatro, Cadena Ser y Más Vale Tarde de La Sexta, que entrevistaron a Yolanda.

Cuatro, por la mañana:

Y el de La Sexta, por la tarde:

Todo bien, salvo que los compañeros de Cuatro pusieron varias veces el vídeo (que habíamos editado y emborronado las caras de los que aparecían), e incluso se lo mostraron a Cayo Lara para que opinara sobre él, pero no mencionaron que nosotros habíamos sacado la historia a la luz. No es que me quiera poner ninguna medalla, pero lo correcto es que nos citemos los unos a los otros, por buena práctica profesional y respeto a las fuentes. La Ser y La Sexta sí mencionaron a eldiario.es (¡gracias!), ese #mediopequeñito.

Después de publicar nuestra información, el Hospital Severo Ochoa emitió un comunicado.

Carta Del Hospital Severo Ochoa

También reaccionó el nuevo consejero de Sanidad, Javier Rodríguez, «Sanidad reta», tras las preguntas que le hizo Rejón: «Si hubo mala práctica médica tendrá que demostrarla un juez». Salida por la tangente. No hablábamos de malas praxis médicas, hablamos de la mala gestión de los hospitales.

En fin, gracias, gracias, gracias sobre todo a Yolanda, mujer brava y valiente, por confiarme su historia y a nuestras intermediarias por ponernos en contacto.
También a mi compañero Raúl Rejón por su trabajo en el artículo y el seguimiento. Y a nuestra jefa de sección, Natalia Chientaroli.