Me gustaría muchísimo escribir con frecuencia aquí. Es más, me gustaría, muchísimo, escribir. Pero no tengo tiempo. Han pasado seis meses en un suspiro. Durante este tiempo he estado trabajando de una manera intensa en porCausa. Como ya dije aquí, he venido editando el site para Univision Desigualdad. Pero también, desde enero, entré a trabajar al núcleo duro de la fundación, coordinando el área de periodismo. Todo el que me conoce sabe lo feliz que estoy aquí. Necesitaba un proyecto, un equipo, una oficina. Y he encontrado eso y más.
En este tiempo, hemos rediseñado la web, lanzado el proyecto sobre migración, montado un peculiar encuentro en el CaixaForum. Tengo un equipo creciente y lleno de energía que me enseña a mirar el mundo con sus ojos; personas con las que me río y converso. Es una gozada. Y la oficina, en si misma, es un lugar genial, compartido con ISGlobal y la Fundación Carasso, confluyendo en la cocina, el baño o la terraza. Oh, la terraza. Merece un post solo para ella.